Los campamentos y las estancias idiomáticas

LOS CAMPAMENTOS Y LAS ESTANCIAS IDIOMÁTICAS

 

El verano está aquí!  El curso escolar termina y nos queda mucho tiempo libre que debemos organizar para sacarle el máximo partido a no ser que queramos oír infinidad de veces la temida frase:  Me aburro!

Muchos padres se plantean la idea de mandar a sus hijos/as a un campamento o estancia idiomática .  A nuestro parecer es una fantástica oportunidad de cambiar de ritmo y aprender mucho; no sólo a nivel de lengua, que también,  sino a nivel personal y de madurez.

Por supuesto los estudiantes en este tipo de campamentos  o estancias tienen un mínimo de 3 horas de clase teóricas y prácticas lo que supone un buen refuerzo a todo lo que han estudiado durante el curso pero además su círculo de amistades se expande y ya no queda reducido simplemente a los amigos “de siempre”.

Por desgracia, la mayoría de niños de hoy en día no tienen demasiado contacto con la naturaleza por lo que  este tipo de inmersiones les viene como anillo al dedo para probar nuevas actividades y quizá encontrar aficiones nuevas en un entorno totalmente natural.

Como consecuencia de ello, desconectan de la tecnología ya que no habrá tiempo ni lugar para ella durante lo que dure la estancia.

Otro punto a tener en cuenta es que le hace más independientes. Deben hacer las cosas por ellos mismos, cumplir un horario, respetar y decidir lo que van a hacer dentro de unos límites lo que les ayuda a madurar y apreciar cosas en las que hasta la fecha no se habían fijado.

Su autoestima se ve  reforzada puesto que harán cosas nuevas con éxito . Salir de su entorno familiar y más cercano y conectar con gente nueva les va infundir después mucha confianza.

En definitiva ir a un campamento o estancia idiomática va a convertirse en una experiencia inolvidable para todos  estos  jóvenes o incluso para los no tan jóvenes.